En la búsqueda de las zapatillas perfectas, la industria del calzado ha intentado crear modelos que den a los usuario soporte, amortiguación y protección; sin embargo, muchas veces en ese intento se ha sacrificado salud y se ha limitado el movimiento natural del pie.

El calzado barefoot, desde su nacimiento, fue creado para dar esa libertad necesaria para caminar sin problemas, gracias a su construcción minimalista que además, recrea la sensación de caminar descalzo, todo esto sin renunciar a la protección de los pies, una parte del cuerpo que muchas veces dejamos en el olvido siendo donde nuestro cuerpo se asienta y donde se soporta.

Hoy, muchas personas están cambiando sus zapatillas deportivas por zapatillas barefoot, y no solo por moda, sino por salud, comodidad, para tener una mejor pisada y alienamiento coporal completo evitando lesiones y ganando en fuerza.

Características que tiene el calzado barefoot

Diseño acorde a la forma natural del pie

Cuando tengas tu calzado barefoot, te darás cuenta que es un producto que respeta la forma natural de tu pie, eso significa que tus dedos van a poder expandirse libremente y que en cada pisada tendrás un mejor equilibrio.

A diferencia de los zapatos convencionales, el diseño de las zapatillas barefoot ayuda a buscar una imitación de la biomecánica natural del movimiento que tenemos los seres humanos, lo que lo convierte en un calzado respetuoso para todos sus usuarios.

Suela fina según el modelo

Aunque varía según el modelo, el calzado barefoot suele tener entre 4 y 12 milímetros de grosor; una delgadez bastante considerable al momento del contacto con el suelo. No, no es incómodo y sí, este diseño favorece a que tus músculos y ligamentos trabajen de forma más activa, como si estuvieras descalzo.

Con esta característica se mejora el agarre sobre diferentes superficies y notarás una sensación de control y equilibrio que muy difícilmente otras zapatillas te podrían dar.

Flexibilidad total

Las zapatillas barefoot pueden doblarse, retorcerse e incluso moverse casi como si fuera un calcetín, y eso te ayudará a que tengas total movilidad del pie. ¡Atrás quedaron las zapatillas que tenían tu pie demasiado apretado y dentro de estructuras rígidas!

Ligereza

Las zapatillas barefoot pesan muy poco y eso te da fluidez al caminar correr o practicar alguna actividad deportiva.

Diseño plano

Por último, pero no menos importante, el diseño es plano eso significa que no tiene tacón ni drop, eso te permite tener una alineación natural del cuerpo y una mejor postura.

¿Aún no estás convencido de tener tu calzado barefoot? Echa un vistazo a los beneficios más importantes que aportan a tu cuerpo con el uso.

¿Cómo elegir las zapatillas barefoot adecuadas?

Todo depende de tus necesidades, tu tipo de pisada y las actividades que realices porque no todos los modelos sirven para todo, conviene considerar algunos criterios.

Revisa los materiales

Un producto de buena calidad debe tener una suela duradera pero flexible, una parte superior transpirable y un interior sin costuras ya que estas podrían causar molestias.

Revisa el ajuste a tu pie

El calzado barefoot no debe apretar jamás porque la idea es que el pie tenga espacio para moverse y que los dedos puedan expandirse. Incluso existen modelos con hormas más anchas en la parte frontal, adaptadas a cualquier tipo de anatomía.

Revisa la actividad que realizas

Para correr, las zapatillas deportivas barefoot deben ofrecer un poco más de protección en la suela, mientras que para el día a día o para hacer deportes de menos impacto, con modelos flexibles estarás perfecto por eso NAW desarrolla modelos versátiles que valen para la marcha natural diaria o para el deporte gracias a su tecnología Bubbleground ®

En el caso de los niños, conviene priorizar un tipo de calzado con cierres ajustables, materiales suaves y buena comodidad, ya que su desarrollo aún está en curso.

Recuerda que vale la pena invertir en calzado de calidad: al final, se trata de la salud de tus pies.

Transición hacia el calzado barefoot

Pasar de un calzado convencional al calzado barefoot quizá puede requerir que tengas algo de paciencia. Debemos recordar que casi hemos pasado la mayor parte de la vida sufriendo con zapatos incómodos y el pie y el cuerpo necesita tiempo para adaptarse.

Para los adultos, recomendamos el uso de este zapato en sesiones cortas y aumentar gradualmente el tiempo conforme tus músculos se fortalezcan. Es muy normal que tengas una ligera molestia al principio, pero al paso de los días cualquier incomodidad desaparecerá.

Para los niños, la transición es mucho más sencilla porque si están aprendiendo a caminar, el calzado barefoot favorece el desarrollo natural del arco plantar, la movilidad de los dedos y una pisada más estable. Recomendamos elegir un tipo de calzado flexible, ligero y con buena protección para exteriores.

Recuerda que si aparece dolor o fatiga excesiva, es mejor reducir la intensidad, ya después notarás una mejora en la alineación, la comodidad y la experiencia general al caminar.